La ecología es la interacción del hombre con el medio ambiente. Por lo tanto, nuestra supervivencia en este planeta depende de nuestro comportamiento con la naturaleza. En la actualidad, dada la magnitud de la degradación ambiental, es tan importante que todos se comporten de manera ecológica. Este es el caso de la gestión de los residuos domésticos.

El impacto de los residuos domésticos en la ecología

Los desechos domésticos son los residuos de los hogares, las comunidades y algunos negocios cotidianos. En general, son residuos de cocina, de oficina, de jardín, etc. Son más o menos biodegradables según el tipo de residuos. Sin embargo, la vida útil de estos residuos puede tener un impacto en el medio ambiente. De hecho, puede suceder que su biodegradación dure mucho tiempo o incluso que sea imposible. En este caso, la contaminación y degradación del suelo aumenta, sin mencionar la contaminación del aire. Aunque es responsabilidad de las comunidades deshacerse de los desechos domésticos y de los que ellos mismos producen, es su deber reducir su basura tanto como sea posible y también clasificarla para facilitar el reciclaje.

Gestionar los residuos de forma respetuosa con el medio ambiente

En primer lugar, comienza con la compra de sus productos. Así que, como los plásticos tardan más de 450 años en degradarse, rechaza su uso. De hecho, su dispersión es una de las causas de la contaminación en todo el mundo. Así que, o bien reutiliza tus viejas bolsas de plástico o usa cestas caseras, las de papel también son tolerables. Además, prefiera siempre los frascos y envases que contengan más productos. Por ejemplo, en lugar de comprar 3 sobres de 400 g de azúcar, opte por un sobre de 1 kg. Además, asegúrese de utilizar productos perennes en lugar de productos desechables como toallitas y pañuelos de papel que sólo obstruyen los residuos. A continuación, sus residuos domésticos deben ser recuperados en la medida de lo posible. Este es el caso de los residuos de comida, que todavía pueden ser utilizados como abono útil para su jardín, si es que tienen alguno. Sólo almacene estos residuos en un contenedor de abono y después de unos meses obtendrá un abono para enriquecer sus plantas. Para los que viven en un apartamento, es necesario un vermicompostador para transformar la basura en abono y fertilizante líquido. En cuanto a los medicamentos caducados y los fondos de aceite y pintura usados, nunca deben ser arrojados al medio silvestre o al sistema de alcantarillado. Preferentemente, devuélvalos al vendedor para ser incinerados (medicinas) o reciclados (otros). Finalmente, nunca olvides clasificar tu basura para facilitar el reciclaje. En efecto, hay que distinguir entre los residuos domésticos y los plásticos de todos los demás residuos porque una vez mezclados, los residuos secundarios ya no pueden ser recuperados.